Venía por la AP-7 y tenía que girar a la izquierda para tomar la C-17, hacia Vic (ésto lo explico en la siguiente entrada).
En la parte superior de mi GPS pone la vía destino a la que tengo que ir en la siguiente maniobra (o el nombre de la calle en la que tengo que entrar). En la parte inferior pone el nombre de la vía en la que circulo actualmente.
Eso lo descubrí más tarde. Pero hoy, cuando iba hacia Vic, sabía que tenía que ir a la izquierda (eso ya me lo había dicho el GPS) pero no sabía dónde estaba exactamente esa izquierda.
Cuando mi GPS dice a la izquierda puede ser porque la vía por la que voy se divide en dos carriles, uno que va hacia la derecha (para salirse de la autopista) y otro que continua recto. Seguir recto, en éste caso, es ir por la izquierda. En ambos casos el carril correcto para circular es el de más a la derecha, hasta que se desdobla claro.
Otro caso es cuando tengo que tomar una salida pero hacia la izquierda. En ese caso también dice a la izquierda, pero como no te sitúes en el carril de más a la izquierda, no podrás salir (o tendrás que cruzar cuatro o cinco carriles en diagonal, algo muy feo de hacer).
Éste último caso es el que me pasó hoy. Como decía venía por la AP-7 y tenía que salir hacia la C-17. En el GPS no me fijé que en la parte superior ya me ponía el nombre ese, C-17. Y por tanto no puede asimilar los carteles que me iba encontrando.
Cuando me di cuenta que realmente tenía que cruzar tres o cuatro carriles hacia la izquierda, me puse manos a la obra. Puse el intermitente a la izquierda e intenté meterme.
Imposible. En el carril contiguo había muchos coches. Mantuve el intermitente, y me pasaron dos coches. Pensé que el tercero me dejaría entrar (teníamos velocidades parejas) así que me metí.
Sonora pitada (y con razón) la del conductor al que le corté la trayectoria. Luego ya no supe que hacer. Ya me había metido en su carril. Y tenía que cambiarme otro carril más, pero me seguía pitando.
Cuando me di cuenta vi que la salida que quería tomar ya se me había pasado, así que volví a la derecha y dejé que continuara circulando (me adelantó al cabo de poco).
Honestamente, tendría que haber desistido de intentar meterme en el carril contiguo, había demasiado tráfico y me había dado cuenta que tenía que cambiarme demasiado tarde.
Un exceso de confianza por mi parte y el error de pensar que aquel conductor me iba a dejar pasar me llevó a cometer un error que pudo entrañar riesgos para ambos (él, y yo).
El exceso de confianza viene de entrar bastante correctamente en las rondas. Ya me parece que seré capaz de hacer maniobras a alta velocidad en cualquier sitio, y no es así. A veces cometo errores evaluando la situación del tráfico.
Por otro lado, también me he dado cuenta que cuando hay mucho tráfico pesado me cuesta concentrarme en mi conducción. Tiendo a mirar mucho al camión que me adelanta. Otro aspecto más a pulir.
Por último, mis disculpas a aquel conductor al que le corté la trayectoria.
1 comentario:
La C17 es mi hábitat actual, y te aseguro que es complicadilla. Muy estrecha para lo que soporta cada día, y a veces parece que los camiones se te echan encima.
No desesperes. Los cambios de carril cuestan un poco, pero tampoco te creas que lo hiciste tan mal. Equiparaste velocidades y pa dentro. No se me ocurre otra manera en ese punto del camino.
¿Que te pitó? Ya. Es que hay mucho pito suelto por ahí. ;-)
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