Entre pitos y flautas me he pasado un mes entero sin salir de la cama. Exagero. Realmente, unas tres semanas, desde el atropeyo.
Sin mover la pierna rota (la izquierda), sí que me he pasado un mes sin moverla. Recuerdo que vino el cirugano a visitarme y me decía que levantara la pierna; yo estaba sentado al borde de la cama e intentaba estirar la pierna. Pero no había manera, la subía muy poquito.
La semana pasada comencé la rehabilitación. La fisioterapeuta me hizo notar que el muslo izquierdo casi no tenía músculo. En casa, comparando ambas piernas, ví que tenía muchísima razón, porque el muslo izquierdo estaba fofo.
Hasta que recupere ese muslo aún pasará tiempo....
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