Esta vez no me pasó a mí.
Fue entre un taxi y un scooter.
Un taxi y un scooter parados en medio de una calle. El scotter se queda pegado al taxi. El taxista baja del taxi y mira los desperfectos en su taxi.
Ni idea de quién era el culpable. Lo único que se es que ambos colisionaron y que no hubo daños personales (por suerte). Pero en la moto iban dos personas, así que hubiera podido ser grave.
Demasiadas prisas en la ciudad...
3 comentarios:
¡Anda! La semana de las motos, eh? Jeje.
Pues sí que son un peligro, a veces, la verdad. Yo siempre, siempre, al cambiar de carril, tanto en autovía como por ciudad, siempre "busco la moto". ;)
Un saludo José Luis, estabas perdido!!!
Hola Di.
Me parece que eso de "Busca la moto" es una misión imposible. O miras el retrovisor (en cuyo caso no miras hacia adelante), o miras hacia adelante (en cuyo caso te puede aparecer una moto en cualquier momento).
De todas formas, yo suelo mirar quien viene por detrás. No sólo motos, también coches y camiones en actitud "peligrosa" para mí.
:-)
A vistazos, José Luis.
Y, en ciudades como Barcelona, mirando por los espejos extreriores incluso cuando no te cambias de carril pero sí que haces un mínimo desplazamiento lateral.
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